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Editorial
Opinión
Texto en el que el autor aboga por ideas y saca conclusiones basadas en su interpretación de hechos y datos

La investigación del apagón se dilata: paciencia, pero con límites

A falta de las conclusiones, cabe demandar a todos sosiego, espíritu de colaboración y la aportación de los datos precisos

La M-30 de Madrid a oscuras durante el apagón.
CINCO DÍAS

El pasado 28 de abril se produjo el peor incidente de la historia del sistema eléctrico español y, de momento, hay pocas certezas sobre lo que ocurrió realmente. De hecho, el panel de expertos que investiga desde Europa el episodio ha remitido una carta al Gobierno de España para encender la señal de alarma y pedirle auxilio tras advertirle de que está encontrando falta de colaboración por parte de las grandes eléctricas a la hora de recabar la documentación del día de autos. Una circunstancia que amenaza con provocar retrasos en las pesquisas, según advierte con inquietud el denominado Entso-E, organismo europeo que lidera el informe y que agrupa a los operadores de red.

Como bien advirtió el presidente de Naturgy, Francisco Reynés, en el reciente foro CREO, organizado por CincoDías, conviene tener paciencia, en tanto son miles los datos que los investigadores deben analizar. El argumento es lógico y comprensible. Sin embargo, esa contención en el juicio ni debería ser ilimitada ni verse jalonada por reproches más o menos velados entre las partes sobre su presunta responsabilidad en el corte eléctrico. Se trata de actitudes que solo siembran la duda y la desconfianza, justo lo último que necesita la opinión pública. Lo que el ciudadano ha visto hasta ahora con inquietud es a Red Eléctrica señalar sin ambages a la generación convencional, y a las grandes firmas eléctricas apuntar a la planificación del operador de red, en ambos casos sobre la base de argumentos técnicos no fácilmente comprensibles para los no iniciados en energía.

A falta de las conclusiones de la investigación, cabe demandar a todos sosiego, espíritu de colaboración y la aportación de los datos precisos para esclarecer las razones de lo ocurrido lo antes posible, si puede ser con un calendario y plazos delimitados para, al menos, tener una primera aproximación de las causas del apagón. Es más, parece difícil pensar que, a la vista de la envergadura del colapso, una única circunstancia pueda explicarlo.

“Red Eléctrica nos informó recientemente de la reticencia de los terceros a compartir los datos relevantes, lo que podría ocasionar posibles retrasos en la investigación del panel de expertos”, subraya la misiva enviada por Entso-E a la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Sara Aagesen. Como telón de fondo, las indemnizaciones millonarias que pueden afrontar los responsables en caso de judicialización del proceso. Nada es casual.

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