Tesla se desploma un 14% en Bolsa tras la agria ruptura entre Elon Musk y Donald Trump
La compañía pierde 190.000 millones de valor en Bolsa en dos días mientras el presidente y el jefe de Tesla se atacan mutuamente


Las acciones de Tesla sufren su peor racha en Bolsa desde que Donald Trump decretara el 2 de abril los mal llamados aranceles recíprocos. El descenso, del 17% en dos días (el 3,5% el miércoles y un 14% adicional este jueves), llega justo después de que el jefe de la compañía, Elon Musk, dijese que la ley fiscal que impulsan los republicanos en el Congreso con el apoyo de Donald Trump es “una abominación repugnante” y la escalada llegase al terreno de los ataques personales. El temor de los inversores es que el hombre más rico del mundo ahuyente ahora a los seguidores de Trump y también que le ponga obstáculos al desarrollo del coche autónomo.
“Estoy muy decepcionado con Elon”, dijo Trump este jueves en la Casa Blanca. “Le he ayudado mucho. Conocía los entresijos del proyecto de ley mejor que nadie aquí presente. No tenía ningún problema con él. De repente, tuvo un problema”, ha añadido, en referencia a la supresión de incentivos a los coches eléctricos y la relajación de las emisiones de coches contaminantes. “Elon y yo teníamos una excelente relación”, dijo Trump. “Ahora ya no estoy tan seguro de eso”, añadió.
Musk, por su parte, continuó atacando el proyecto de ley desde su red social X: “Sin mí, Trump habría perdido las elecciones. Los demócratas controlarían la Cámara de Representantes y los republicanos estarían 51-49 en el Senado”, indicó el principal financiador de la campaña republicana a la presidencia.
Ahí no acabó la cosa. Trump amenazó a Musk con retirarle los contratos gubernamentales con que cuenta en sus empresas y el multimillonario de origen africano dijo que el presidente no publica los archivos del pedófilo Jeffrey Epstein porque él mismo aparece en ellos. Parece un punto de no retorno.
Enfrentarse al presidente le puede salir muy caro a Tesla. Musk contaba con su cercanía a él para lograr una regulación más favorable del coche autónomo y librarse de investigaciones de diferentes agencias. Ahora, se da la vuelta a la tortilla después de que la involucración política de Musk le haya pasado una cara factura a la compañía.
La anterior cercanía de Musk al presidente, su papel como inspirador de los recortes y despidos del Departamento de Eficacia Gubernamental (DOGE), su apoyo a partidos de la ultraderecha europea y los constantes bulos que difunde en su red social X provocaron numerosas protestas frente a sus concesionarios en Estados Unidos y otros países, algunas de ellas violentas.
La politización de la marca y el aumento de la competencia fueron los factores clave para que las ventas de coches de la compañía cayesen un 13% en el primer trimestre. El propio multimillonario reconoció que su activismo político estaba resultando perjudicial para Tesla. En varios países europeos, la caída de las ventas ha continuado.
Por lo general, los votantes demócratas son más favorables al coche eléctrico y los republicanos menos, pero enfurecer al tiempo a los partidarios y detractores de Trump puede salirle caro a la compañía. La caída en Bolsa de estos dos días supone una pérdida de valor de unos 190.000 millones de dólares, más de 150.000 de ellos este mismo jueves, en la que ha sido la mayor pérdida de valor en un día de la historia de la empresa. En el acumulado del año, las acciones bajan un 24,5%.
Tesla facturó 19.335 millones de dólares entre enero y marzo, un 9% menos que un año antes, y su beneficio se hundió un 71%, hasta los 409 millones de dólares (unos 358 millones de euros al tipo de cambio actual). Al presentar los resultados, Musk dijo las palabras que los accionistas querían oír. “Creo que probablemente a partir del próximo mes, mayo, mi tiempo dedicado al DOGE se reducirá significativamente”, indicó en una llamada con analistas. “A partir del mes que viene, dedicaré mucho más tiempo a Tesla”, apostilló. Las acciones de Tesla reaccionaron al alza con las noticias que implicaban un alejamiento de Musk de la política.
El multimillonario de origen sudafricano se despidió la semana pasada de Trump en un acto con buenas palabras en la Casa Blanca. Al día siguiente, el presidente anunció que retiraba la nominación para dirigir la NASA de Jared Isaacman, amigo, cliente y aliado de Musk, al que el multimillonario, y máximo donante destacado de la campaña del presidente, había recomendado expresamente.
Esa decisión de Trump no sentó nada bien al multimillonario, que previamente, en una entrevista concedida a la CBS, ya había mostrado su decepción con el proyecto de ley fiscal. “Francamente, me ha decepcionado ver el enorme gasto público, que aumenta el déficit presupuestario, en lugar de reducirlo, y socava el trabajo que está realizando el equipo del DOGE [Departamento de Eficacia Gubernamental, que estuvo encabezado por el empresario]”, señaló entonces Musk.
Este martes, sin embargo, fue mucho más allá. “Lo siento, pero ya no aguanto más. Este proyecto de ley del Congreso, enorme, escandaloso y repleto de gastos superfluos, es una abominación repugnante. Qué vergüenza para quienes lo han votado: saben que han hecho mal. Lo saben”, escribió el magnate en su red social, X.
Este miércoles, Trump tuiteó a través de su red social, Truth, sin hacer comentarios, el tuit de despedida de Elon Musk de sus tareas gubernamentales, en el que daba las gracias al presidente.
Mientras, Musk siguió arremetiendo contra el proyecto de ley desde su red social, en la que tiene 220,2 millones de seguidores y un algoritmo que da especial visibilidad a sus mensajes. “¡Este proyecto de ley de gastos contiene el mayor aumento del techo de la deuda en la historia de Estados Unidos! Es la Ley de Esclavitud por Deuda", tuiteó en uno de los nuevos mensajes.
“Llama a tu senador, llama a tu congresista, ¡no está bien arruinar a Estados Unidos! ¡MATA EL PROYECTO DE LEY!“, escribió en otro, haciendo un juego de palabras con la película Kill Bill.
Al tiempo, fue retuiteando mensajes contrarios a la iniciativa. Con el acercamiento de Musk a Trump, la gran pregunta es cuánto dos egos de su tamaño serían capaces de mantener la armonía que mostraban. No han pasado ni siquiera cuatro meses desde que el republicano regresó a la Casa Blanca. Y la ruptura ha adquirido tintes impensables.
Tesla publicará a principios de julio la evolución de las ventas del segundo trimestre. La compañía ha dejado de ser la líder mundial por número de unidades de coches eléctricos vendidos, superada por la china BYD.
Sobre la firma
